Pasada la conmoción que produjo el resultado de las elecciones para los asambleístas que reformarán la Constitución chilena y mientras los mercados no dejan de mostrar su desencanto con esa decisión soberana, el Gobierno y el sector de las telecomunicaciones aprovecharon la celebración por el día Mundial de las Telecomunicaciones y la Sociedad de la Información para anunciar inversiones por 2.000 millones de dólares para mejorar la conectividad en los próximos tres años.
Se trató de una foto perfecta pues los protagonistas fueron las máximas autoridades de las telecomunicaciones del gobierno de Sebastián Piñera y las siete principales operadoras del país. El desembolso comprometido entre el sector público y el privado estará destinado a capacitar en nuevas habilidades digitales, reducir la brecha digital e impulsar la economía en 5G.
Ampliar la conectividad es un objetivo de esta gestión, tal como lo manifestaron Gloria Hutt, ministra de Transportes y Telecomunicaciones (MTT), y Pamela Gidi, subsecretaria de Telecomunicaciones. Si bien en los últimos años hubo una aceleración en la inversión en infraestructura de telecomunicaciones, la penetración de la banda ancha en Chile de 58,8 por ciento al cierre de 2020, de acuerdo a los datos de la Subsecretaría de Telecomunicaciones (Subtel) muestra la necesidad de continuar trabajando en la reducción de la brecha digital pues hay todavía un 40 por ciento de hogares no conectados.
De ahí la relevancia del llamado “Acuerdo nacional por la conectividad para reducir la brecha digital” cuya inversión básica está orientada a ampliar la infraestructura en el territorio chileno, tarea que estará a cargo no sólo del MTT sino también de Claro, Entel, GTD, Movistar, Mundo Telecomunicaciones, VTR y WOM, las siete compañías con las que se realizó el anuncio.
Los proyectos que surjan en el marco de este convenio se vincularán con las diversas acciones que se impulsan desde el gobierno en materia de desarrollo de infraestructura, desde la Fibra Optica Nacional (FON) hasta la Fibra Optica Austral (FOA) que beneficiará con conectividad de alta capacidad a más de tres millones de usuarios que viven en más de 200 comunas en el primer caso, y a más de 450.000 personas en el segundo ubicados en las zonas más extremas del país. El objetivo es que cuando finalice esta gestión se haya duplicado la red de fibra óptica de los 12.000 kilómetros actuales a más de 24.000 kilómetros.
En relación a 5G el objetivo es conectar a más de 366 localidades bajo un modelo de contraprestación social en un plazo máximo de 18 meses. Se prevé que beneficie a más de 300.000 personas que por primera vez accederán a internet móvil. A esta infraestructura se sumarán 199 hospitales ubicados en distintos lugares del país.
Estos proyectos oficiales, entre varios otros, se vincularán asimismo con los que llevan adelante cada una de las empresas con las que se firmó este acuerdo. Los máximos ejecutivos de cada una de ellas expresaron, cada uno a su turno y en el marco del anuncio, el compromiso asumido, y destacaron el buen ambiente de negocios que se da en Chile para favorecer estas inversiones, en un mensaje que no sólo muestra la adhesión a la política oficial en materia de telecomunicaciones sino que también puede interpretarse por elevación hacia los constituyentes independientes que establecerán los principios de la nueva Constitución de este país.
De hecho, las inversiones anunciadas en el marco de este compromiso representan prácticamente la mitad de los aportes realizados por todo el sector entre 2015 y 2019 y que rondaron los 4.200 millones de dólares.
La ministra Gloria Hutt, señaló que “la pandemia mostró la relevancia de las telecomunicaciones en nuestro quehacer diario. Pero también instaló la necesidad de un nuevo estándar de conectividad, que permita soportar actividades como el teletrabajo y la educación en línea. Este compromiso que hoy firmamos será una herramienta clave para ampliar la conectividad en todo el país, siendo además un importante elemento para reducir de manera significativa la brecha digital existente, con mejores conexiones y precios más asequibles, permitiendo a más usuarios acceder a estas herramientas”
Por su parte, Gidi apuntó que “son miles de compatriotas que hoy no tienen acceso a Internet o que cuentan con una de baja calidad, por lo que están sumidos en una pobreza digital que impacta negativamente su calidad de vida. Este compromiso busca eliminar esta desigualdad, con un acceso equitativo a la red que permita que a futuro ningún niño o niña de Chile quede rezagado en su aprendizaje porque su familia no puede costear una conexión a Internet. Por esta razón, agradecemos el compromiso de la industria de formar parte de este acuerdo que permitirá que avancemos más rápido hacia la nueva revolución digital”.
