El estado de situación de la Empresa Hondureña de Telecomunicaciones (Hondutel) tiene reminiscencias a las historias de Gabriel García Márquez y no solo por estar inmersa en el paisaje caribeño sino porque su crisis financiera es tan pero tan profunda que su proveedor de energía eléctrica le cortó el suministro y, por carácter transitivo, dejó sin Internet a medio país. Pero no solo eso, ante semejante escenario, los funcionarios del Gobierno saliente diseñaron un ambicioso plan de acción que involucra el robustecimiento de su infraestructura -con cable submarino incluido- que deberá ejecutar el gobierno entrante. Con todo, Hondutel tiene quien le escriba, a diferencia del Coronel de Gabo; pero ambas historias comparten la cuota de esperanza.
La salida de la crisis de Hondutel no es la privatización sino la reactivación, así lo valoró Carlos Madero, secretario Coordinador General de Gobierno, y detalló que la clave radica en convertirla en una “institución de vanguardia de Internet y de banda ancha”, para lo que hay que generarle una inversión tal que le permita incrementar su capilaridad y convertirla en la impulsora de la conectividad local.
El plan prevé la adquisición de un cable submarino que permita duplicar o cuadruplicar los anchos de banda, una inversión que “será a gran escala, que el próximo gobierno tendrá que ejecutar”, adelantó Madero a medios locales como El Heraldo, recordando que la actual administración se encuentra a pocos de concluir su mandato, el 27 de enero de 2022.
Lo cierto es que la empresa estatal, que se encuentra operativa hace 44 años, atraviesa una grave y larga crisis financiera, cuyas pérdidas a hoy superan los 41,3 millones de dólares (1.000 millones de lempiras). Y sus deudas también son significativas: desde hace 14 meses adeuda el salario de sus 2.200 empleados y tampoco pagó la luz. Hace dos semanas, la Empresa Energía Honduras (EEH) le cortó el suministro energético por falta de pago, tras acumular un rojo de 18,6 millones de dólares (unos 450 millones de lempiras) y, como consecuencia, hubo un apagón masivo de Internet.
Es cierto también que en julio pasado, la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel), la Secretaría de Finanzas y Hondutel se reunieron para establecer un plan de salvataje, al tiempo que el Congreso Nacional aprobó una amnistía para el pago de diversos servicios públicos, a cambio de que la empresa dispusiera de 83,7 millones de dólares (200 millones de lempiras) para ponerse al día con los salarios atrasados.
Pero el intento por reflotar la compañía no es nuevo y La Prensa también repasó iniciativas como la desarrollada en 2013, cuando se creó una comisión interventora y un plan de rescate sugerido por el sindicato de Trabajadores de las Telecomunicaciones en Honduras (Sitratelh) en 2019, entre otras iniciativas que no prosperaron hasta el momento.
El panorama de mercado del país, realizado por TeleSemana.com exhibe que hubo una sostenida caída de la penetración móvil, donde Hondutel compite con Claro (America Móvil) y Tigo (Millicom); y aunque las mismas empresas son las que operan el servicio de telefonía fija, el 72 por ciento de las líneas fijas pertenecen a Hondutel. En materia de banda ancha fija, por su parte, las mismas tres empresas se reparten ese mercado cuya velocidad promedio es de 5,3 Mbps.
El cuatro por ciento de los hondureños es abonado al servicio de Internet domiciliaria y el 69 por ciento, de Internet móvil. El ente también registró que el 39 por ciento de la población utiliza Internet a diario, según los datos que diversos medios citaron y usaron como fuente a la Conatel. Al cierre de sus actividades a fin de 2020, la empresa mostró ingresos por telefonía básica por 23 millones de dólares (558.7 millones de lempiras) un descenso del 15 por ciento en la comparación interanual; pero también una caída en los ingresos de sus otros servicios, que se ubicó en casi 15 millones de dólares (360.1 millones de lempiras), a causa de la cancelación de las suscripciones, por ejemplo, a Internet.
“A Hondutel no le quisieron dar el fortalecimiento que requería en el momento que estaba compitiendo sola y se fue en decadencia” dijo Fernando García, presidente Ejecutivo de la Asociación Nacional de Industrias (Andi) al portal La Prensa y agregó que “cuando entró la competencia tuvo que modernizarse, pero no ha logrado tener el nivel que tenía antes”.
Y por eso, Madero propone generarle condiciones de infraestructura que le permitan ser competitiva en conectividad: “la solución es generarle mayor inversión para que el rubro de Internet se pueda ampliar”, dijo y aspiró a que “pueda competir con las grandes empresas o proveedores que se dedican a la venta de Internet en el territorio nacional”.
“Nuestro mundo cambió y las telecomunicaciones tienen una importancia estratégica como nunca en la historia de la humanidad, ya que fueron el único recurso que nos mantuvo comunicados, unidos desde nuestras casas y oficinas” dijo Juan Carlos Sikaffy, presidente del Consejo Hondureño de la Empresa Privada.
“El mundo va cambiando, las comunicaciones se hacen cada vez más por Internet y por las redes sociales, tenemos que ubicar a Hondutel en la realidad tecnológica del mundo”, concluyó el también Coordinador del Gabinete de Reactivación Económica.
