La banda de 26 GHz, destinada a la conectividad escolar en el marco de la gran subasta realizada para desplegar la tecnología de quinta generación en Brasil, consiguió recaudar 558.623 millones de dólares (3.100 millones de reales) y, aunque no convocó a todos los jugadores esperados y dejó lotes vacíos, muchos actores la valoran como el resultado de un “proceso exitoso” aunque ya hay quien advierte la oportunidad para una posible “malversación”. Todo, al calor del éxito que significó la licitación realizada jueves y viernes pasados, y que vio ganar lugares a Vivo, Claro, TIM, Algar Telecom, Neko (vinculada a Surf Telecom) y Fly Link (operador de Minas Gerais)… aunque entre ellos ya se encuentre un arrepentido.
Como toda crónica que se precie, cabe comenzar por las empresas y las bandas que encontraron feliz coincidencia aquel viernes histórico y que salieron de allí comprometidas. Entre todos, se destacó Vivo por haber sido el mayor inversor en la banda de 200 MHz con carácter nacional, al quedarse con tres (G3, G4 y G5) de los seis lotes adquiridos y por los que desembolsó 28.543.900 dólares (158,4 millones de reales); al tiempo que otros cuatro bloques (800 MHz) quedaron desiertos.
Detrás suyo, Claro, compró los lotes nacionales G1 y G2 y se llevó 400 MHz por 19.029.200 dólares (105,6 millones de reales). Y, en lo que respecta a TIM, se quedó con siete bloques tras invertir 13.334.900 dólares (74 millones de reales), de las cuales un solo bloque de 200 MHz, el I6, involucra un alcance nacional y una década de uso, y para el que involucró 4.865.430 de dólares (27 millones de reales) al elevar la prima en un 2,2 por ciento.
A su vez, los bloques regionales que obtuvo TIM se dividen en 400 MHz en San Pablo, en Sur y en la zona comprendida por Río de Janeiro, Minas Gerais y Espírito Santo (excepto el área que ya posee concesionada Algar).
En San Pablo, este operador se quedó con dos lotes regionales: uno por 2.162.420 de dólares (12 millones de reales) en la primera ronda y por dos décadas, y otro en la segunda ronda y por 10 años por 1.081.210 de dólares (seis millones de reales).
En la región sur, a su vez, TIM acaparó un bloque en la primera ronda por 1.441.610 de dólares (ocho millones de reales y otro en la segunda por la mitad de dinero y años de control, por 720.806 de dólares (cuatro millones de reales); al igual que en los bloques RJ, MG y ES donde desembolsó 1.982.210 de dólares (11 millones de reales) por 200 MHz que controlará durante dos décadas y otros 1.081.210 de dólares (seis millones de reales) por la concesión a una década.
Por su parte, Algar concentró a cinco de los seis lotes regionales disponibles en su área de concesión, es decir, las 87 ciudades que integran Minas, Mato Grosso do Sul, São Paulo y Goiás; tras formular ofertas por casi un millón de dólares (5,3 millones de reales) con una prima del 14 por ciento y hasta del 71 por ciento en aquel en el que Fly Link le ofreció competencia.
Neko, a su vez, se quedó con 200 MHz de 26 GHz en San Pablo, tras desembolsar 1.530.270 de dólares (8.492 millones de reales) y con una prima del 49,9 por ciento, vencer la propuesta realizada por TIM.
Por último, Fly Link, se llevó el último de los bloques regionales para su área de cobertura, unos 200 MHz, por 162.183 dólares (900.000 reales), es decir, una prima del 10,27 por ciento. Sin embargo, apenas transcurrido un fin de semana de obtenida su licencia, el operador retiró su deseo de poseerla.
Sí, el lunes,la empresa que controla al operador, Uberlândia (MG), se excusó mediante un comunicado en el que advirtió que, por no haber obtenido más lotes, es “inviable desarrollar un plan de negocios que contenga solo el lote H42″, dado que involucra “una tecnología incipiente con un mercado aún muy restringido”.
Esta decisión implica que el lote H42 en la banda de 26 GHz quede ahora vacío y que el operador saliente deba afrontar una multa por el 10 por ciento del precio ofertado, que deberá hacer efectivo en 15 días.
A este lote ahora vacante, se le suman los disponibles en las zonas Norte, Noreste o Medio Oeste que no resultaron atractivos para ningún operador, ni en la primera vuelta y la convocatoria a hacerse de su uso durante 20 años, ni en la segunda con la consecuente disminución a la mitad de su plazo de explotación, pero también de los montos comprometidos.
Pero no sólo allí: en San Pablo tres bloques quedaron ociosos, en Sur otros cuatro y cuatro más en la zona comprendida por Río de Janeiro, Minas Gerais y Espíritu Santo. E, inclusive, cuatro bloques nacionales de 200 MHz quedaron vacantes.
Con todo, hubo funcionarios que valoraron positiva a esta subasta de espectro cuyo objetivo central fue conectar escuelas y uno de ellos corrió por cuenta de Artur Coimbra, secretario de telecomunicaciones del Ministerio de Comunicaciones (MCom), tal como lo registraron los medios locales Teletime y Telesíntese. En esos diálogos, celebró el ingreso de “dos nuevas empresas, con intereses y planes de negocio muy específicos, enfocados en el Internet de las Cosas”, tal como lo describió además de adelantar que no será necesario utilizar los recursos en aplicaciones de espectro dado que “hay escuelas que están a 50 metros de un cable óptico, y hacer la caída (de la fibra para la escuela) cuesta menos de 180 dólares (1.000 reales)”, señaló.
Tal como estaba previsto en la letra de la subasta y había sido adelantado por TeleSemana.com, toda la apuesta involucrada al despliegue de las inversiones y de los recursos, se articulará a partir del Grupo de seguimiento y monitoreo de los proyectos de conectividad escolar (GAPE) y la Entidad Administradora de Conectividad Escolar (EACE), que cobrarán vida con la labor de las empresas comprometidas y los ministerios asociados, el de Comunicaciones y el de Educación.
Lo cierto es que el GAPE deberá estar conformado en dos semanas, o 15 días tras culminada la subasta, y Coimbra adelantó que este grupo de representantes necesitará de “un diagnóstico preciso”, aseguró que cuentan con un censo escolar pero que por ser declaratorio es “poco fiable”.
“Necesitamos más información sobre la calidad de la conexión”, dijo y los medios citados recordaron que la Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) lanzaron una consulta a tal efecto; un sondeo que le permitirá al GAPE poder priorizar las escuelas en función de su necesidad de conectividad.
Cabe señalar, además, que Coimbra figura entre los nombres postulados para ocupar la máxima responsabilidad de la Agencia, aunque en el diálogo aquí citado no hubo mención a la posibilidad.
Por estas horas, los medios locales también recogieron la advertencia de Cristieni Castilhos, gerente de conectividad de la Fundación Lemann, quien ponderó que el monto obtenido por esta subasta en particular fue por debajo de lo esperado y advirtió la necesidad de profundizar la estrategia para posibilitar el objetivo de conectar escuelas.
“Entendemos que será necesario hacer un uso muy eficiente de los 3.100 millones de reales. Si se quiere conectar, hay que ser consciente del riesgo de gastar mal”, dijo en diálogo con Teletime, en el que también puntualizó sobre la importancia de no duplicar esfuerzos y “coordinarnos para ver otras políticas públicas”, dijo y señaló ejemplos como el Plan Nacional de Banda Ancha para Escuelas (PNBLE) y el Programa de Innovación en Educación Conectada (PIEC).
En su cálculo -y mientras aguarda los resultados que el BID y la Anatel están realizando y que se sumarán a los mapeos que ellos mismos realizan con el Instituto Escola Conectada- solo el 15 por ciento de las escuelas disponen de conectividad para el uso del alumnado.
El ejecutivo también se refirió a la posibilidad de articular con otras líneas surgidas al calor de la subasta de 5G, como Norte Conectado, que prevé la estructura de conexión en el Programa Amazonia Integrada y Sostenible (PAIS): “El operador va a conectar las escuelas de la región, pero tomar la estructura también puede ser para conectar la región en su conjunto, y la conexión en las escuelas termina siendo un ancla. La escuela debe verse como el primer punto en conectarse”, dijo.
El objetivo es que toda la red escolar pública tenga conectividad para uso pedagógico en 2024, pero aunque sobrevive la alegría de la semana pasada alrededor de los logros de 5G, comienzan a comentarse las preocupaciones por la concreción de objetivos, como el recién mencionado.
“Hay mucho que garantizar, pero creo que podemos llegar al 2024” apostó el ejecutivo y refleja la esperanza de muchos.
