La transformación digital de las sociedades, de sus trámites, de sus movimientos, de sus consumos y aspiraciones es un hecho, también la necesidad de darle la seguridad que la coyuntura requiere. Por estas horas, desde la Argentina se conocieron dos indicadores interesantes: por un lado, la Secretaría de Innovación Pública celebró haber alcanzado los tres millones de usuarios digitales en sus plataformas de gestión pública y avanza en el estudio de la incorporación de blockchain; al tiempo que el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires ofreció detalles de su apuesta por X-Road y la creación de ciudadanos 4.0. Pero la jornada está pincelada también por los datos que exhibió el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), en los que se exhibe la adhesión de hábitos digitales de la población mexicana, en buena medida, traccionada por el comienzo de la emergencia sanitaria que impuso el covid-19.
En Argentina, la plataforma de Trámites a Distancia (TAD) totalizó los tres millones de usuarios y “no sólo triplicamos el número de argentinas y argentinos que eligen la plataforma, sino también las tramitaciones resueltas”, dijo el órgano en un comunicado en el que también señalan que, durante 2021, se realizaron 7.106.117 tramitaciones desde TAD, con un promedio de 19.468 diarios.
“Construimos herramientas digitales para un Estado ágil, sustentable y accesible”, dijeron desde la Secretaría de Innovación Pública y precisaron que el índice de personas usuarias creció un 220 por ciento desde su lanzamiento en 2016, al registrar hasta 2019 a unas 900.000 personas y que sumara otras 2,1 millones entre 2019 y 2021.
Y, mientras la Secretaría de alcance federal evalúa incorporar blockchain, el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires anunció que trabaja en la incorporación de la plataforma X-Road que, abierta y desarrollada en Estonia, sirve como hub de interoperabilidad para interconectar los sistemas sobre una capa de seguridad y trazabilidad fiable e inalienable. Algo así funciona hace casi 15 años en el país, o desde que la provincia de Neuquén, en el sur de la Argentina, incluyera al modelo estonio en su Plan Maestro de Gobierno Electrónico, que ya había estrenado en 2003.
El plan porteño, por su parte, corre por cuenta de la Secretaría de Innovación y Transformación Digital y tiene por objeto que los habitantes sea transformen en Ciudadanos 4.0. Esta iniciativa tiene tres pilares básicos, entre los que se encuentra la aspiración a que el 70 por ciento de los tramites públicos estén digitalizados para fin de año y el 95 por ciento de ellos para 2023. Inclusive, la apuesta es que el ciudadano no deba exhibir una y otra vez su documentación al Estado, sino que se habiliten automatismos seguros establecidos sobre la estrategia de cadena de bloques.
“Internet sacó las fronteras de la comunicación, blockchain elimina las fronteras de las transacciones y del dinero. Y esto es un problema para quienes quieren ponerle territorio a algo que no lo tiene. Por eso los bancos centrales queriendo limitar las transferencias son como las compañías de teléfono queriendo cobrar por usar WhatsApp para llamar a alguien en otro país”, ejemplificó el secretario porteño Diego Fernández, en diálogo con el portal argentino iProUP.
Sucede que la noticia muchas veces reiterada se confirma: la pandemia sirvió como un acelerador de la transformación digital en todos los niveles de la población latinoamericana. En México, por ejemplo, el IFT publicó un vasto informe titulado “Adopción, el uso y la satisfacción de las aplicaciones y herramientas digitales en tiempos de Covid-19”; un documento que, disponible aquí, analiza las respuestas y los indicadores obtenidos entre el 14 de abril y el 13 de mayo de 2021 para exhibir las actividades que realizan las personas en las aplicaciones o herramientas digitales a través de Internet.
Entre sus principales hallazgos, el relevamiento reflejó que una tercera parte de las personas encuestadas que hoy hacen compras en línea, lo hacen a partir del comienzo de la emergencia sanitaria. Del total registrado, los encuestados señalaron sus preferencias por portales como Mercado Libre (67,3 por ciento) y Amazon (30,3 por ciento) y que el medio de pago más extendido es el de las tarjetas de crédito.
La banca en línea, a su vez, reflejó que el 17 por ciento de las personas usuarias del servicio de Internet fijo utiliza este tipo de banca, el 24 por ciento de ellos a partir de la pandemia; y recurren a ella para realizar transferencias (60,2 por ciento de los casos), y el pago de sus servicios (41,4 por ciento de los casos).
A su vez, el 65,6 por ciento de los encuestados que tienen Internet fijo hacen videollamadas, casi una cuarta parte (37,2 por ciento) lo hace a partir de la pandemia, para resolver necesidades de estudio (52,7 por ciento) y de trabajo (41,9 por ciento), cuya duración oscila entre las dos horas y media y la hora y media, en líneas generales. E, inclusive, un 29,5 por ciento de los casos admitió haber recurrido a las videollamadas con motivo de celebraciones familiares.
Del mismo modo, el trabajo consultó sobre el uso de las redes sociales y el 88,8 por ciento de los usuarios de telefonía móvil encuestado dijo utilizar una, aunque sólo el 10,8 por ciento lo hace desde el comienzo de la pandemia, al tiempo que WhatsApp (95,7 por ciento de los casos) y Facebook (86,8 por ciento de los casos) fueron las declaradas como más utilizadas.
Inclusive, el 28,7 por cientos de los usuarios de Internet fijo realizaron consultas digitales a los servicios de salud y el 25,2 por ciento realizó trámites en plataformas de gobierno.
