Mientras algunos países de la región aún tienen pendiente la definición sobre el destino de la banda de 6 GHz, tal como sucede en México y en la Argentina, en Brasil, donde por ahora el uso aprobado de este espectro está orientado solo al interior, Qualcomm, en sociedad con la Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel) y proveedores de Internet (ISPs por su sigla en inglés), instaló una red inalámbrica gratuita para uso outdoor en Campo Belo, una localidad ubicada al sur de San Pablo.
Se trata del primer punto de conexión Wi-Fi 6E al aire libre que se instalará de modo temporal en este país durante un lapso de 60 días. La decisión de la Anatel de otorgar todo el espectro de 6 GHz a Wi-Fi aplica, por el momento, solo para indoor en este país, y no para espacios exteriores, de ahí la relevancia de esta prueba piloto encarada a partir de la extensión de una licencia de Uso Temporal de Espectro (UTE).
Esta experiencia permitirá complementar, asimismo, los puntos Wi-Fi públicos que operan en las bandas de 2.4 GHz y 5 GHz de quinta generación, también conocidos como Wi-Fi 5. La zona cubierta por Wi-Fi 6E en modo temporal se caracteriza por contar con un polo gastronómico, de ahí que esta iniciativa haya encontrado el apoyo de la Asociación Campo Belo Gastronomía. Desde el lado de la conectividad, Telium se ocupó de brindar la banda ancha mientras que la empresa Cambium se hizo cargo de los puntos de acceso Wi-Fi 6E y un enlace punto a punto que opera en la banda de 6 GHz.
“Todos los que tengan un teléfono celular que admita la sexta generación (de Wi-Fi) y la banda de 6 GHz, que llamamos WiFi 6E, podrán aprovechar estas velocidades más altas. Quienes no tengan soporte para esta tercera banda también disfrutarán (Wi-Fi), pero en otras bandas”, dijo Hamilton Mattias, director de Producto de Qualcomm, en declaraciones que tomó TeleSíntese.
Debido a las controversias que genera el uso de este espectro para Wi-Fi y las posibles interferencias que podría tener con redes de otras tecnologías, se informó que Qualcomm usa una plataforma de Coordinación de Frecuencia Automatizada (AFC, por su sigla en inglés) que garantiza que Wi-Fi 6E no produzca ningún tipo de alteración con las conexiones fijas.
En cuanto al inicio de esta prueba experimental, se supo que las velocidades que entregó la red durante la mañana de la activación rondó los 900 Mbps de descarga mientras que la carga se ubicó en torno a los 610 Mbps. La latencia -uno de los aspectos sobre los que, se asegura, se advertirá un gran cambio- se ubicó en un ping de 5,24 ms y el jilter en torno a los 2,10 ms. Son datos que suelen ser mirados con gran atención por los gamers, por citar apenas un ejemplo cotidiano.
La Anatel estuvo presente en la activación de esta red temporal de Wi-Fi 6E y uno de sus asesores, Moisés Queiroz Moreira, subrayó que “WiFi 6E es una tecnología complementaria al 5G”. El organismo recibirá hasta el próximo 24 de enero aportes a la consulta pública sobre uso exterior de la conexión inalámbrica. De ahí el interés de demostrar su fiabilidad por parte de las compañías interesadas en que este ecosistema se desarrolle de una vez en la región.
La intención de Qualcomm, en tanto, es probar que la tecnología y la plataforma AFC son eficientes para evitar interferencias, además de demostrar que la tecnología puede funcionar también en áreas densamente pobladas y no solo en las rurales.
Por el lado del municipio de San Pablo, hay interés en expandir los puntos de acceso Wi-Fi gratuitos que, en la actualidad, llegan a 1.088 espacios, aunque el plan es contar con 20.000 puntos de conexión a Internet bajo esta modalidad. El entusiasmo es tal que el alcalde Ricardo Nunes, dijo que “la primera conexión WiFi 6E de América latina es un orgullo para nosotros. Y todo lo que pasa aquí repercute en Brasil”.
No solo en Brasil, podría agregarse. Todo lo que Brasil encara en materia de telecomunicaciones termina teniendo eco en la región. Así como la licitación de 5G es considerada de las mejor desarrolladas en América latina, que ahora el gigante sudamericano comience a probar el uso de la banda de 6 GHz destinada a Wi-Fi para el exterior es otro indicio sobre el cual prestar atención. Esto sucede en momentos en que Colombia acaba de destinar toda esa frecuencia a Wi-Fi mientras, por el contrario, hace un par de meses Chile dio marcha atrás sobre esa resolución hasta tanto cuente con un estudio que le permita saber con mayor certeza qué impacto sobre el conjunto de la población podría tener la apuesta total por Wi-Fi.
