MWC 2023: Movistar Chile anunció que levantará sus redes de cobre y que apagará 2G

“Uno de los objetivos de la compañía para 2023 es iniciar el retiro de todo el cobre que desplegamos desde 1880, año en que comenzó a operar la entonces Compañía Chilena de Teléfonos de Edison. Así, esperamos en 2024 transformar a Movistar en una compañía full fibra óptica. A su vez, nos hemos desafiado a retirar todo el cobre durante los próximos tres o cuatro años”, dijo Fernando Saiz, director de Asuntos Públicos de Movistar Chile en el marco del anuncio que el operador realizó en el Congreso Mundial de Móviles (MWC 2023).

Sí, en un plazo que no debería extenderse más allá del 2027, Movistar quiere terminar de actualizar la tecnología de sus tendidos de infraestructura física: retirar los cables de cobre para reemplazarlos por fibra óptica e impulsar el avance de la evolución tecnológica 2G a 4G y 5G.

“Lo más relevante es que esta migración masificará el uso de la fibra óptica, mejorando la experiencia de las personas, hogares y empresas”, dijo Saiz sobre una apuesta que les permite resolver tres temas de relevancia: el reemplazo tecnológico, el compromiso medioambiental y, de alguna manera, el padecimiento que tienen en torno al frecuente robo de cableado.

Así, por un lado, la incorporación de esta tecnología le permite completar ese cinco por ciento que resta para totalizar el parque de conectividad con fibra al hogar, al mismo tiempo que avanza en la concreción de los objetivos de sustentabilidad que tiene el Grupo a nivel global, en relación a reducir la huella de carbono, al comprometerse a retirar en cinco años toda su red de cobre. El tercer aspecto, no menor de este paso, implica dar respuesta al saqueo de redes de cobre que el operador suele denunciar en el país.

En ese camino, el operador también anunció apagones de sus redes 2G y de servicios basados en las redes de cobre como, por ejemplo, la telefonía pública. En el caso de las redes 2G, por ejemplo, busca dar impulso a sus evoluciones, 4G y 5G, por tratarse de una tecnología que se desplegó en la década de 1990 y que, en palabras de Saiz, “permitió, principalmente, el uso de los mensajes de texto SMS”.

En la región, el apagón de las redes 2G es una tendencia regional en ascenso. Es más, un estudio realizado por Syniverse y Kaleido Intelligence advirtió que el 69 por ciento de los operadores del mundo lo analizan de cara a tener una mayor disponibilidad del servicio, al mismo tiempo que despliegan 4G y 5G.

Un análisis publicado por José Otero, vicepresidente para América latina y el Caribe de 5G Americas, en el portal Brecha Cero y en el que aborda esta cuestión, advierte que en Chile “las conexiones móviles 3G son menos de dos millones, frente a un total de más de 20 millones de conexiones 4G, mientras que las de 2G son prácticamente inexistentes para la transmisión de datos”, y recuerda que “el punto de inflexión cuando 4G derrocó a la 3G en Internet móvil se dio a fines de 2016, y a partir de allí, la caída de la tercera generación se mantuvo constante”.

Para el especialista, aspectos como la cobertura y la migración de los usuarios son dos factores indispensables a tener en cuenta al momento de planificar la desconexión de una red: “Antes de pensar en quitar de circulación una tecnología determinada, es preciso que exista una alternativa para la continuidad del servicio, para lo cual se requiere de cobertura geográfica con una nueva tecnología, y que los usuarios del servicio cuenten con un dispositivo o terminal apto para conectarse a la nueva red. Ambos aspectos suelen darse progresivamente con la maduración o masificación de las nuevas tecnologías, un proceso que suele demorar algunos años”.