Con los mayores lanzamientos de satélites a nivel global, tanto de constelaciones de órbita baja (LEO, por su sigla en inglés) como de los tradicionales geoestacionarios, las llamadas redes no terrestres (NTN, por su sigla en inglés) están experimentando un dinamismo a tono con el resurgimiento de este sector. Conectividad total e Internet de las Cosas (IoT, por su sigla en inglés) son los dos segmentos que se están beneficiando por esta irrupción y, cada vez más, la posibilidad de tener conexión directa desde el smartphone al satélite. Todo esto tal vez no tomaría la dimensión que experimenta si no fuera por el despliegue en paralelo de las redes 5G. La convergencia tecnológica pareciera estar dando nuevas oportunidades de negocios en estas áreas en donde ya son 10 los proveedores de banda ancha satelital en lo que va de 2023.
Es lo que plantea un nuevo documento de 5G Americas, sobre 5G y NTN. En verdad, se trata de la actualización de un documento publicado a principios de 2022, en donde ya se consideraban las posibilidades de integrar las redes no terrestres en una experiencia móvil y estandarizada en todo el planeta. En aquella oportunidad se brindó un panorama sobre estas infraestructuras, las posibilidades de despliegue – que además de los LEO y los GEO, consideraba también a los MEO-, los desafíos en cuanto al compartimiento de la RAN y del roaming, además de la seguridad, entre otros puntos.
El reporte actualizado plantea las nuevas posibilidades de una NTN 5G, considerada como una red que ahora puede brindar conectividad inalámbrica de alta velocidad a localidades remotas y/o desatendidas gracias al aprovechamiento de un “segmento espacial” ubicado del lado del acceso de la red móvil. Esta especie de ventana que se abre en esta convergencia habilitará la provisión de servicios móviles a los usuarios desde el satélite a la zona terrestre en que se encuentren. Todo esto es posible pensarlo en la actualidad a partir de los despliegues comerciales de 5G que, hasta el primer trimestre de 2023, totalizaban 267 redes, de acuerdo a datos de TeleGeography.
Las antenas VSAT/dish dispuestas en los equipos de los usuarios son una de las razones por las que la cobertura comienza a tener relevancia en el mercado. A través de las bandas de frecuencias Ka o Ku se habilitan nuevas posibilidades de nuevos servicios de cara al usuario final, en principio para atender situaciones de emergencia pero con la promesa de evolucionar hacia prestaciones más sofisticadas, básicamente, Internet de alta velocidad directa del satélite al smartphone, tal como lo plantea la empresa de la Universidad de Florida que viene haciendo investigación en este terreno.
En este sentido, el reporte de 5G Americas, cuyo enfoque principal está centrado en el mercado de los Estados Unidos, asegura que “con una solución NTN basada en 3GPP en la versión 17 que utiliza el espectro de banda sub-2Ghz, es posible lograr una velocidad de decenas de megabits por segundo en el enlace descendente (aunque esta velocidad máxima se compartirá entre todos los usuarios en una celda determinada), así como un retraso de ida y vuelta en el rango de unas pocas decenas de milisegundos”.
Pero anticipa que con el Release18, el espectro adicional en la banda Ka ofrecerá una velocidad mucho mayor, del orden de cientos de Mbps, a dispositivos no portátiles que utilicen antenas parabólicas pequeñas, similar a la que ofrece el servicio Starlink de SpaceX.
Advierte que la velocidad dependerá de la capacidad del dispositivo y el espectro que se esté utilizando, sin olvidar los tamaños de los archivos que se estén transmitiendo. Más allá de estas consideraciones, que no son menores, que ya se cuente con tecnología que permite contar con una comunicación confiable ante desastres naturales o catástrofes es una gran ventaja. Por eso, resalta que esta posibilidad de posibilitar una comunicación directa entre el satélite y el smartphone expande la cobertura, especialmente en las zonas de difícil acceso y/o rurales. Esa complementación es especialmente relevante cuando todavía es deficiente la conectividad en estas áreas.
A esta ampliación de conectividad de cara al usuario y hacia nuevas geografías, se le suman lo potenciales casos de aplicaciones de IoT con impacto en la agroindustria, la logística, la energía y minería y la atención de infraestructuras de misión crítica.
Aquí el aprovechamiento pasa por la posibilidad de contar con mayores volúmenes de datos traficados en tiempo real. La posibilidad de sensorizar un campo, por ejemplo, estaba habilitada con tecnologías anteriores. Pero sumar 5G le otorgar nuevas posibilidades para actuar en el momento cuando surja alguna necesidad: desde anticipar una cosecha hasta destinar más camiones para atender una necesidad no prevista de distribución de productos. Los casos son innumerables. La ventaja, ahora, es que contar con mayor cobertura y velocidad permite darle una nueva impronta a las actividades económicas en general y a los distintos negocios que se desprenden de ellas, en particular.
Como se mencionó anteriormente, son 10 las compañías que están habilitando estas capacidades de Internet satelital de banda ancha: Starlink, OneWeb, Kuiper (servicios previstos para 2024), Galaxy Space, Boeing, Inmarsat, Telesat, Echostar, HughesNet y Viasat.
A estas se suman las que ya están brindando conectividad directa desde el satélite al smartphone: SpaceX, AST Space Mobile, Lynk, Sateliot, Iridium, Orbcomm, GlobalStar y Ligado. A las que se incorporan aquellas compañías con las que tienen acuerdos -como AT&T, T-Mobile, Verizon, Apple, MediaTek y Skilo- y el detalle de las prestaciones sobre las que trabajan y que ofrecerán al mercado.
La reducción de los costos que ha venido logrando la industria satelital más el advenimiento de las constelaciones de órbita baja han permitido un resurgimiento de este sector y la posibilidad de brindar nuevas oportunidades de conectividad, concluye el reporte de 5G Americas, que puede descargarse desde aquí. Hacia adelante, avizora el ingreso de nuevos jugadores a este escenario y nuevas alternativas para las ciudadanías y las economías.
