La tecnología 5G RedCap promete revolucionar el mercado de IoT y ¿el modelo de negocio de los operadores?

La 5G RedCap emerge como una solución crucial dentro del ecosistema de la 5G, llenando lo que podría considerarse un vacío al ofrecer una alternativa de menor costo y consumo energético en comparación con la red 5G estándar. Esta característica la convierte en una opción interesante para una variada gama de aplicaciones del Internet de las Cosas (IoT), que debe ser uno de los servicios que ayuden a los operadores a monetizar sus nuevas redes ¿o no?.

En el contexto actual de una profunda transformación digital de todos los sectores verticales, 5G RedCap podría jugar un papel significativo en el ámbito de los dispositivos wereables destinados a los consumidores finales, pero realmente donde seguramente acabe siendo crucial sea en el mercado B2B o B2B2C. Por ejemplo, 5G RedCap podría tener un papel clave en dispositivos médicos. Los instrumentos de monitoreo remoto de pacientes necesitan recolectar y transmitir datos de manera constante y confiable, incluso en zonas con cobertura móvil insuficiente. Es aquí donde 5G RedCap puede proporcionar la conectividad estable que estos dispositivos requieren para funcionar sin interrupciones, abriendo una fuente de ingresos para los operadores, pues no se trata sólo de transmitir sino del valor de la información que se está emitiendo, lo cual redunda en vías de monetización adicionales.

En el ámbito de la vigilancia por video, por ejemplo, la 5G RedCap también puede abrir nuevas vías de ingreso para los operadores. Gracias a la tecnologías se pueden potenciar sistemas de vigilancia en alta definición, monitoreando áreas extensas, y utilizando un bajo consumo energético. Nuevamente, no se trata de transmitir de forma eficiente, sino del valor de la información transmitida lo que puede cambiar los esquemas de monetización, añadiendo valor al precio commodity de la conexión.

Las aplicaciones industriales de la 5G RedCap son, sin duda, otro de sus atractivos. Desde la conexión de sensores industriales a la nube hasta el monitoreo y control en tiempo real de los procesos de manufactura, la tecnología ofrece una baja latencia que la hace óptima para aplicaciones que demandan precisión extrema, como la robótica industrial.

No obstante, los casos mencionados son sólo una fracción de las muchas posibilidades que ofrece 5G RedCap. Desde la medición inteligente hasta la agricultura automatizada y la logística avanzada, esta tecnología tiene el potencial de transformar una amplia variedad de campos, y esta transformación abre vías de negocio muy amplias para los operadores de telecomunicaciones. Pero ¿sabrán los operadores aprovechar esta nueva oportunidad tecnológica o acabarán siendo solamente los proveedores de la conectividad? La respuesta tendría que ser optimista, pero las evidencias del pasado invitan a la cautela.

Uno de los grandes atractivos de 5G RedCap es su menor costo, con dispositivos esperados a un precio más asequible que los 5G estándar. Esto se debe a que cuentan con menos características y un hardware menos complejo. Además, la eficiencia energética de la 5G RedCap es otro atributo que ayuda a justificar su existencia en cuanto a los costos. Su precio y menor consumo viene acompañada de un mayor alcance en comparación con 5G estándar. Esta característica la vuelve idónea para aplicaciones en áreas rurales o lugares con deficiente cobertura.

Y para rematar su lista de características clave, su fiabilidad la convierte en una alternativa para aplicaciones sensibles que requieran ciertas garantías de transmisión. Gracias a su empleo de una banda de frecuencia diferente, esta tecnología es más resistente a interferencias, lo que garantiza una conectividad más sólida.

Prueba de su importancia son los pilotos y trabajos que se están llevando a cabo en el sector para su desarrollo y lanzamiento comercial por parte de varios operadores como Telefónica, AT&T, Verizon, T-Mobile, China Mobile, China Unicom, NTT DoCoMo, SK Telecom o Telstram, entra otros. En 2022, Telefónica llevó a cabo un ensayo de 5G RedCap en España, a través de un chipset de MediaTek y una radio de Ericsson. La prueba demostró ser un éxito al exponer las capacidades de 5G RedCap en diversas aplicaciones de IoT, como wereables, sensores industriales y video vigilancia. El compromiso de Telefónica con esta tecnología queda reflejada en el hecho de que el operador es miembro del 5G Open Innovation Lab (5G OIL). Este consorcio, conformado por operadores, proveedores y centros de investigación, se dedica a desarrollar y desplegar la tecnología 5G RedCap. A través del 5G OIL, se han realizado varias pruebas de 5G RedCap, incluida una en Barcelona este mismo año 2023

Por su lado, en 2021, AT&T realizó pruebas con 5G RedCap en su laboratorio en Dallas, Texas, utilizando un chipset de MediaTek y una radio Nokia AirScale mientras su división AT&T Labs anunciaba los primeros pilotos esta misma semana. Un año después, en 2022, era Verizon quien realizaba pruebas con la tecnología en Nueva Jersey, empleando un chipset de Qualcomm y una radio de Ericsson. En este caso, el operador se centró en pruebas con drones, medidores inteligentes y logística. Y este mismo año, y también en Estados Unidos, T-Mobile realizó una prueba de 5G RedCap en Las Vegas. En este último caso, se utilizó un chipset de Samsung y una radio Nokia AirScale. La prueba logró demostrar las capacidades en diversas aplicaciones como vehículos conectados, hogares inteligentes y realidad aumentada.

Mientras tanto en Asia, los operadores también han estado experimentando con la tecnología. China Mobile, en 2022, llevó a cabo una prueba en Beijing utilizando un chipset de Intel y una radio de Huawei. Esta prueba demostró las capacidades de 5G RedCap en aplicaciones tan variadas como ciudades inteligentes, monitoreo ambiental y automatización agrícola. Su competidor, China Unicom, realizó una prueba con la tecnología en Shanghai este mismo año. Utilizando un chipset de MediaTek y una radio Nokia AirScale, la prueba demostró su utilidad en aplicaciones relacionadas con la logística, manufactura y atención médica. En Japón, NTT DoCoMo, también este año, llevó a cabo una prueba con un chipset de Qualcomm y una radio de Ericsson. En este caso, la prueba iba orientada a demostrar aplicaciones de conducción autónoma, cirugía remota y realidad virtual. Y en Corea del Sur, SK Telecom también se sumó a las pruebas de 5G RedCap en 2023, mediante el uso de un chipset de Samsung y una radio Nokia AirScale para aplicaciones como ciudades inteligentes, realidad aumentada y entregas con drones.

Por último, en Australia, Telstra realizaba sus propias pruebas 5G RedCap este mismo año apoyándose en un chipset de Qualcomm y una radio de Ericsson con la idea de demostrar su uso en agricultura inteligente, monitoreo ambiental y logística.

Con estos desarrollos encima de la mesa, un informe reciente de CounterPoint Research señala que el desarrollo de 5G RedCap está abordando nuevas aplicaciones que no pueden ser atendidas por los estándares avanzados de 5G, como eMBB/URLLC y LPWAN. Y si bien los chipsets 5G RedCap ya están disponibles en el mercado, se espera que su implementación comercial se lleve a cabo en la primera mitad de 2024. Según las previsiones de CounterPoint, se estima que los módulos 5G RedCap representen el 18 por ciento de las ventas totales de módulos celulares para IoT para el año 2030. Esto indica un potencial de mercado significativo, especialmente en naciones en desarrollo donde el costo es clave para la adopción masiva de tecnología para la transformación digital.

La llegada de esta tecnología no invalida a tecnologías existentes para IoT que seguirán siendo utilizadas por los operadores como NB-IoT y LTE-M. Y la realidad es que la tecnología 5G RedCap viene a ser una versión mejorada de ambas, aunque no del todo. Las tres entrarían a ser parte de la categoría de tecnologías celulares LPWA diseñadas con el mercado IoT en mente y todas comparten la promesa de un bajo consumo de energía, una larga vida de batería y una amplia cobertura, pero también se distinguen entre ellas por sus características únicas.

La tecnología 5G RedCap ofrece el mayor rendimiento, alcanzando un máximo de 150 Mbps de descarga y 50 Mbps de carga. Esto la hace apta para aplicaciones que requieren un mayor ancho de banda, como la transmisión de video y el monitoreo remoto. En términos de latencia supera a NB-IoT y LTE-M, con un máximo de un milisegundo. Y este hecho la hace apta para aplicaciones que exigen una comunicación de datos en tiempo real, como la robótica y la automatización industrial. Donde es menos eficiente NB-IoT y LTE-M es en su alcance, algo que no parece ser un impedimento para su desarrollo. Por último, 5G RedCap presenta el menor consumo de energía entre las tres tecnologías.

En general, 5G RedCap se posiciona como la tecnología más avanzada de las tres, ofreciendo el mayor rendimiento, la menor latencia y el alcance más corto. Sin embargo, también es la más costosa y requiere el hardware más complejo. NB-IoT es la tecnología más madura de las tres, siendo menos costosa y necesitando hardware más simple. LTE-M representa un buen compromiso entre 5G RedCap y NB-IoT, ofreciendo un equilibrio en términos de rendimiento, latencia, alcance y consumo de energía.

La nueva tecnología no deja de ser una nueva herramienta en el arsenal de los operadores, pero no dejaremos de enfatizar que independientemente de la tecnología los operadores deben encontrar la forma de ser los generadores de valor más allá de la conectividad.

Cuenta con más de 22 años de experiencia cubriendo el sector de las telecomunicaciones para América Latina. El Sr. Junquera ha viajado constantemente alrededor del mundo cubriendo los eventos de mayor relevancia para la industria en América, Europa y Asia. Su experiencia académica incluye un BA en periodismo escrito por la Universidad de Suffolk en Boston, MA, y un Master en Economía Internacional en la misma institución.

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