Colombia estableció como objetivo de gestión de gobierno y de esfuerzo sectorial que la brecha digital en el país deberá haber alcanzado al 85 por ciento de la población para 2026 y, con ese norte, se van avanzando en diferentes lineamientos estratégicos. Sin embargo, la GSMA advirtió que esta meta no será posible sin avanzar sobre “reformas regulatorias y tributarias”.
En la antesala de la subasta de espectro 5G en Colombia, que se concretará en menos de 24 horas, y en minutos en que se ultiman muchas definiciones al respecto, la GSMA publicó el reporte titulado “Brechas de Conectividad en Colombia: un estudio cuantitativo”, en el que repasa la coyuntura nacional y de cada una de las regiones del país, para advertir que hay problemáticas de asequibilidad profundas, que se traducen en brechas de uso, y que por ello es necesario inyectar fuertes inversiones.
Por ejemplo, el reporte subraya que la cobertura 4G en Colombia ya llega al 85 por ciento de la población y que en Bogotá, por caso, se logró alcanzar al 87 por ciento, mientras que en Chocó al 74 por ciento y es, en ese caso, el promedio más bajo. Y, al tiempo que repasa este escenario, la GSMA dice que en las condiciones actuales de mercado, expandir la cobertura 4G al 95 por ciento de la población demandaría de una inversión de 4.500 millones dólares, o el equivalente a un promedio de 800 dólares por cada una de las 5,5 millones de nuevas personas conectadas.
En ese caso, el reporte advierte que Santander, Antioquia, Meta y Boyacá requerirían la mayor inversión, con montos superiores a los 350 millones de dólares por departamento; y que sólo Bogotá representaría una inversión rentable para el mercado privado.
“Los resultados del análisis indican que la expansión de la cobertura 4G más allá de los niveles actuales no es en general rentable en las condiciones vigentes del sector. Alcanzar los objetivos de conectividad es posible sin financiamiento público adicional, pero pasa necesariamente por la decisión política de afrontar una modernización regulatoria y tributaria del sector que ayude a resolver los problemas de asequibilidad e impulse la demanda en la población de bajos ingresos”, sentencia el reporte.
En el camino para llegar a esa conclusión, repasa también que un gran desafío de la inclusión digital pasa por la brecha de uso y cuantifica que 15,3 millones de colombianos cuentan con acceso a Internet móvil, pero que no utilizan los servicios por falta de asequibilidad (al dispositivo o al paquete de datos).
Y recuerda que la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) establece que es ideal que el costo total de la propiedad móvil (TCMO, en inglés) no deba superar el dos por ciento del nivel de ingresos mensual del usuario para estimar que, en este caso el rango queda por encima del valor de referencia propuesto. Este punto resulta clave pues requeriría un financiamiento de casi 3.150 millones de dólares a nivel nacional, o de 200 dólares por usuario no conectado, para lograr que esos 15,3 millones de colombianos rompan esa brecha.
Pero para el organismo, “reducir esta brecha sin incurrir en financiamiento público es posible con reformas de política pública que impulsen la adopción de los servicios”. En ese camino, propone eliminar o reducir las cargas –que valora “distorsivas”– tanto del lado de la oferta (como impuestos regionales o el canon de habilitación general para operadores de telecomunicaciones) como de la demanda (como las tasas aduaneras a dispositivos). Insta, del mismo modo, a eximir al sector del impuesto del valor agregado (IVA), en planes y dispositivos destinados a la población más vulnerable.
Con la adopción de las primeras medidas, la GSMA estima que se podría incrementar en un cinco por ciento la cantidad de conectados, equivalente a 2,8 millones de nuevos usuarios para 2030, al tiempo que la exención del IVA, que en Colombia es del 19 por ciento, podría agregar más de siete millones de nuevos usuarios para ese mismo año.
“Ambas reformas en simultáneo permitirían incorporar 9,8 millones de nuevos usuarios al servicio, y así llevar el nivel de adopción al 86 por ciento de la población en 2030. En este escenario, más de 10 departamentos alcanzarían la meta de 85 por ciento de conectados en 2026”, dice la GSMA en su anuncio, cuyo reporte completo está disponible aquí.
“Cerrar el último tramo de la brecha digital será un desafío. Necesitamos políticas públicas modernas que reflejen el lugar que la conectividad tiene en nuestra sociedad: no un lujo ni un privilegio, sino un democratizador del acceso a oportunidades”, dijo Lucas Gallitto, director para América Latina de la GSMA. Subrayó que “la industria móvil está comprometida con conectar a todos los colombianos: alcanzar la meta del 85 por ciento es posible con decisiones de gobierno alineadas con esta visión y una estrecha colaboración público-privada”.
“Conecta TIC 360” fue el nombre de la estrategia de gobierno presentada hace una decena de meses por la ahora ex titular del Ministerio de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (MinTIC), Sandra Urrutia. La iniciativa integró el plan de desarrollo nacional y en ella se precisó que “la tecnología no es un privilegio, es un derecho” y se aprobaron más de 63 millones de dólares para financiar las iniciativas que se desarrollarían en torno a la conectividad en 2023. Entre ellas, se bregó por el despliegue de infraestructura y por la promoción de una inclusión que incluyera la adopción de habilidades digitales poblacionales.
Con cambio de titular al frente del Ministerio TIC, el objetivo de gobierno sigue siendo el de conectividad “con apropiación y para la productividad”, de cara a llegar a 2026 con el 85 por ciento de la población digitalmente integrada.
