El número de accesos de banda ancha en Brasil sigue en crecimiento, mantiene la tendencia positiva frente a la caída constante del resto de los servicios tradicionales. La fibra óptica acompaña con mejoras mensuales hace al menos tres años y, aunque aún está lejos de las tecnologías líderes, ya forma parte del podio de las más utilizadas.
La Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel) registró 30,3 millones de accesos a banda ancha al cierre de julio. La fibra óptica fue responsable de 4,1 millones o el 13,6 por ciento del total mientras que xDSL se ubicó primera, con 12,8 millones y cable módem segunda, con 9,5 millones.
En julio de 2015 Brasil registraba 1,1 millones de accesos a banda ancha mediante fibra óptica. Un año después ya había 1,4 millones y a igual mes de 2017 superó las 2,3 millones. En el último año se incorporaron 1,8 millones de suscriptores vía fibra óptica, con lo que la base de esa tecnología creció 75 por ciento anual.
Claro es responsable de más del 30 por ciento de los abonados al servicio, Vivo del 25 por ciento y Oi del 20 por ciento, entre otros. Los dos últimos anunciaron recientemente acciones relacionadas al servicio, con fuerte apuesta a la fibra. Vivo incorporó servicios digitales para los planes de banda ancha y Oi firmó un acuerdo con Huawei para, entre otros puntos, acelerar la oferta de servicios con FTTH. También TIM anunció que expandirá su red de fibra al hogar al noreste brasileño.