La filial brasileña de Telefónica presentó los resultados correspondientes al segundo trimestre del año, en el que informó ganancias por 1.113 millones de reales (215,8 millones de dólares). La cifra es 21,6 por ciento menor que la registrada un año atrás, lo que la empresa atribuye a más gastos en el período. El Ebitda cayó 3,8 por ciento hasta 4.103 millones de reales (795,8 millones de dólares), con un margen de 39,8 por ciento.
La compañía agregó que trabaja en la “constitución de un vehículo para la construcción y oferta de red de fibra óptica neutra e independiente para el mercado mayorista. Este vehículo podrá contar con participación de terceros y tendrá como foco la aceleración en la expansión de la red en nuevas localidades”. En paralelo, confirmó que su Consejo de Administración aprobó un nuevo programa de recompra de acciones de la empresa.
Vivo, que es parte de la propuesta conjunta para adquirir Oi Móvil, invirtió 1.909 millones de reales (370,2 millones de dólares) entre abril y junio, cifra en línea con sus previsiones. El 82 por ciento se destinó a la red, principalmente a capacidad y expansión de las tecnologías 4G y 4.5G y fibra óptica. El resto se dividió en un 15 por ciento para tecnología y sistemas de la información y tres por ciento para productos y servicios.
Los ingresos operativos líquidos cayeron 5,1 por ciento interanual hasta 10.317 millones de reales (2.001 millones de dólares), como consecuencia de una baja en todos los segmentos: de 5,1 por ciento hasta 6.618 millones de reales (1.283,6 millones de dólares) en el apartado móvil, con casi un 41 por ciento de caída en la venta de equipos, y de 5,1 por ciento hasta 3.700 millones de reales (717,6 millones de dólares) en el fijo.
El total de accesos móviles creció 0,9 por ciento hasta 74,4 millones, consecuencia de un alza de 3,4 por ciento en el segmento pospago, que ahora es responsable de casi el 58 por ciento de la base. Con esto el market share del operador trepó al 33 por ciento, que es 8,6 puntos más que el segundo y el mayor nivel en 14 años, según la firma. El ARPU cayó 2,6 por ciento hasta 27,9 reales (5,4 dólares). La cobertura 4.5G, añadió, está presente en 1.360 ciudades.
El número de abonados fijos cayó 14,6 por ciento interanual hasta 17,6 millones. La firma cerró el trimestre con 6,5 millones de accesos a banda ancha fija, 9,8 por ciento menos que antes. El 43 por ciento accede por FTTH, una tecnología que ya tiene presente en 216 ciudades. Perdió el 13 por ciento de su base de TV paga, ahora compuesta por 1,2 millones de suscriptores, lo que lo ubica en cuarta posición en el mercado. En tanto, cerró junio con 8,3 millones de líneas de voz, casi sin cambios en la comparación interanual.