Finalizó el MWC Barcelona 2021 y estos son los temas que dominarán la agenda de la industria

Cayó el telón del MWC Barcelona. El Mobile de la pandemia, del formato híbrido. El Mobile más cloud que se haya tenido en la historia de este encuentro de la industria. No sólo porque gran parte de lo que sucedió en estos cuatro días se haya apoyado en las diversas tecnologías de comunicaciones sino porque, tal como lo reza el slogan de ese año, Connected Impact, el impacto de la conectividad pasa porque todo lo que se transacciona sobre las redes toma otro sentido y otro valor cuando esa información y esos datos dan lugar a operaciones apoyadas en la nube.

En las últimas conferencias hubo un deseo generalizado de que la edición 2022 vuelva a parecerse más a las que se sucedieron hasta 2019 cuando más de 100.000 personas llegaban hasta Barcelona para formar parte de las conferencias, congresos, encuentros y reuniones de negocios. Superada la pandemia ¿es posible afirmar que el MWC volverá como otrora? Ya en 2020 las compañías se dieron cuenta que no necesitaban invertir cientos de miles o millones de dólares/euros para tener un stand, visibilidad y alcance con los clientes. La pandemia les hizo ver que, por menos dinero lograban lo mismo o casi lo mismo. Claro que el velocísimo proceso de adopción y transformación digital que desde hace un año y medio atraviesa al mundo fue el factor clave para que esto sucediera.

Pero un congreso como este es siempre una buena excusa para escuchar a oradores que, de otro modo, sería más dificultoso. También lo es para el encuentro, un café, un almuerzo o un trago compartido. ¿Qué fue lo que dejó este MWC 2021 más allá de estas buenas experiencias humanas?

Trataremos de hacer un repaso general aunque no exento de ciertos caprichos y recortes parciales porque el formato híbrido del MWC es tan apabullante como el viejo 100 por ciento presencial.

Si hasta 2019 Huawei era uno de los máximos exponentes de este congreso, hecho que quedaba evidenciado por el tamaño de sus stands y la cantidad de actividades que acompañaba, este año la empresa que quiso poner su impronta fue Amazon Web Services (AWS) que auspició una muy buena cantidad de las exposiciones que se sucedieron a lo largo de los cuatro días. Y con un recelo casi oriental se reservó las mejores exposiciones propias sólo para el formato presencial. Allí no hubo cloud que soportara la visibilidad más allá de lo que sucedía dentro de la FIRA de L´Hospitalet de Llobregat.

AWS dio cuenta de los acuerdos que viene celebrando con los distintos operadores de telecomunicaciones, desde AT&T-DirecTV a Bell Canada pasando por Vodafone, Telefónica, Facebook, SK Telecom, Dish, Swisscom y los pequeños prestadores. Dio su visión sobre 5G, Open RAN, edge, vehículos conectados, transformación de las redes, automatización, cloud pública, privada, híbrida, IoT y consumo eficiente de energía.

Como se advierte, AWS está en todos los temas de la agenda de la industria y trabaja con varios de sus principales referentes. Como para que no queden dudas de a quién se debe acudir para avanzar en los procesos de transformación que hoy necesitan las operadoras. Un dato no menor: Adam Selipsky, su CEO, debutó en Barcelona como uno de los keynotes de esta edición. “La industria de las telecomunicaciones ha basado su prosperidad en servicios de conectividad. Se trata de un ejercicio muy complejo desde el punto de vista técnico y requiere mucho capital” para construir redes y centros de contacto, es decir, infraestructura que es cara y “casi siempre muy lenta de construir” lo que impide ser ágil. Razón por la que, al llevar a la nube los proyectos y la experimentación las inversiones se pueden orientar a crear nuevos servicios y mejorarlos con altos niveles de flexibilidad.

Los oradores de primer nivel fueron varios. Se destacó, particularmente, la presencia virtual de Elon Musk, tal vez el más esperado de todos, quien dio su visión sobre cómo los satélites de SpaceX podrían vincularse con las redes de fibra óptica y de 5G para conectar a los no conectados. Y aunque no parece haber generado ningún efecto en particular en las redes sociales esta vez sí fue capaz de transmitir a través de la pantalla el esfuerzo y el riesgo inversor que supone encarar una constelación de satélites.

Las exposiciones sobre 5G estuvieron a la orden del día, con Open RAN como tema de agenda obligatoria en todos los encuentros. De hecho, los proveedores de chips salieron a mostrar cómo se subieron a esa tendencia. Intel fue uno de los que se subió a la ola de la RAN abierta y a través del caso del operador Reliance Jio en la India, mostró cómo se puede transformar a una operadora de telecomunicaciones desde el core al acceso y a edge “que es donde más rápido crece esta transformación. Cloud y edge ayudan a ir más rápido hacia 5G”, dijo durante su presentación Dan Rodríguez, vicepresidente de Intel corporate.

El mundo fintech también se coló en esta edición de una manera mucho más contundente. Porque apareció el concepto de “fintel”, que combina el trabajo de las fintech con las operadoras de telecomunicaciones. Uno de los casos que se expusieron fue el de Facebook con la fintech fonYou que permite que las operadoras ofrezcan nuevos servicios a través del análisis de datos y patrones de comportamiento que permite sugerir desde la carga de crédito hasta efectuar una compra y, así, incrementar su ARPU.

Quedó claro también que las operadoras de telecomunicaciones son las que tienen que provocar la disrupción. Y que ella vendrá, inexorablemente, de la mano de cloud, 5G, IoT, edge, Open RAN y demás tecnologías asociadas y que forman parte del nuevo ecosistema. “La oportunidad real de 5G pasará por las aplicaciones industriales: autos conectados, conducción automatizada, interfaces digitales financieras, fábricas automatizadas”, recordó Darrel Jordan-Smith, vicepresidente de cuentas globales y de industria de Red Hat, quien consideró que este es el camino para que las compañías de telecomunicaciones se conviertan en operadores de servicios digitales.

Fueron numerosos los tours virtuales en donde se hizo hincapié una y otra vez en estos temas. Sin embargo, también se puso el acento en lo que traerá edge. Sandro Tavares, director de soluciones de telecomunicaciones de Dell Technologies, señaló que las inversiones en “en el borde” alcanzarán los 700.000 millones de dólares de cara a 2030 siendo los sectores de salud, de manufacturas, energía y utilities, y automotrices los que capitalizarán el 64 por ciento de esos montos: salud participará con el 21 por ciento, las manufacturas con el 19 por ciento y las automotrices y el sector de la energía con el 12 por ciento cada una.

“Esta es la oportunidad para que las compañías tomen un lugar para habilitar a los verticales a ayudarlos a desarrollar esas aplicaciones. Es una gran chance para los proveedores de telecomunicaciones porque están en una posición de ventaja en este contexto”, agregó.

Las conferencias giraron en torno a estos temas en general. El punto en común fue la necesidad de evolucionar hacia la nueva etapa, la que habilitará 5G que, con más de 170 redes comerciales desplegadas en el mundo, promete comenzar a revolucionar los sistemas productivos, más allá del impacto que generará sobre los usuarios al final de la escala de valor.

¿Qué pasó con Huawei en esta edición del MWC tan pero tan cloud? Volvió a tener el stand más importante de la feria, con el eslogan Lighting up the future (Iluminando el futuro) y entre los mensajes que emitió se destacó el de su compromiso para reducir la huella de carbono a través de soluciones TIC.

“A esta habilitación de las TIC la llamamos nuestra ‘huella de carbono’. La huella de carbono de la industria de las TIC representa sólo alrededor del 2 por ciento de las emisiones totales. Pero las tecnologías de las TIC pueden utilizarse para reducir las emisiones globales totales hasta en un 20 por ciento. La integración de tecnologías digitales y energéticas nos permite utilizar nuevos avances tecnológicos en inteligencia artificial, conectividad y cloud computing para digitalizar a la industria energética””, sostuvo David Li, presidente de Huawei Europa Occidental durante el primer día del Foro Verde del MWC 2021.

Como toda buena feria tecnológica también hubo espacio para ver algunos productos en funcionamiento. Ampliamente comunicada, se destacó la camiseta YouCare, de la compañía ZTE, que puede analizar parámetros biovitales con sensores casi imperceptibles colocados en la tela. La prenda -que también tiene una versión en corpiño deportivo – no deja de ser un “control remoto de salud” pues envía esos parámetros a una unidad de control que registra los datos y los convierte en formato digital para, luego, transmitirlos al teléfono de quien la viste o a su reloj inteligente.

A esto se sumó un gorro quirúrgico que permite a los médicos grabar las cirugías y realizar conexiones en directo gracias a una cámara muy pequeña integrada que apunta a sustituir las cámaras y móviles no esterilizables dentro de las salas de operaciones.

Ambos pueden ser un ejemplo claro de que será la salud el terreno en el que más fuertemente impactarán las redes de próxima generación, tal como se prevé en las proyecciones de inversión de la próxima década mencionadas más arriba.

Como todo MWC hubo mucho más que, en este raconto, quedó afuera. El telón, este año, se cerró con el MWC Caribeean Summit, donde parece que se trabaja muy seriamente en la evolución de las redes de quinta generación.

“Gracias a todos por el “aguante” de este año”, fue la frase final en la página oficial del MWC Barcelona 2021. Fue un MWC 2021 con tapabocas, PCR y test de antígenos obligatorio. Con distancia física en los auditorios y muchísima menos gente que la que habitualmente recorría los pasillos de la FIRA y de la ciudad. Chau Barcelona. Hasta 2022. ¿De qué modo nos encontraremos? La pandemia lo dirá.