Neko (Neko Serviços de Comunicações Entretenimento e Educação Ltda) deberá pagar la obligación monetaria que asumió al momento de tomar espectro en la banda de 26 GHz, en la subasta de 5G, para garantizar la conectividad descolar allí prevista. El pago se ubicará por encima de los 1.091 millones de dólares (53.788.477,88 reales) luego que el directorio de la Agencia Nacional de Telecomunicaciones de Brasil (Anatel) aprobara por unanimidad la propuesta de Vicente Aquino, consejero de la Agencia, presidente del Grupo de Seguimiento para el Costeo de Proyectos de Conectividad Escolar (GAPE). El funcionario consideró que, sin esta concreción, la iniciativa gestionada por la Entidad Administradora de Conectividad Escolar (EACE) no podría garantizar el acceso de alta velocidad, y por tres años, a 215 escuelas y sus 38.700 estudiantes. Todo esto ocurre en un territorio cuyos municipios vienen actualizando su normativa para facilitar los despliegues.
La decisión tomada sobre el fin de la semana pasada surgió como consecuencia del bache que propició la renuncia de Neko al derecho de explotar el espectro adquirido en la banda de 26GHz, asumido en el marco de la subasta de 5G en noviembre de 2021. Esta renuncia, formulada hace casi un año, siguió el camino inaugurado por Fly Link, aunque éste lo formuló a un fin de semana de realizada la subasta. Pero en el caso de Neko, la Agencia considera que el compromiso tomado debe cumplirse y determinó que “ejecutará la garantía prestada por Neko, para que la aseguradora Ezze Seguros SA asuma el valor de 53.788.477,88 reales, que será debidamente actualizado, conforme previsto en el Aviso 5G”.
¿Qué pasó con Neko? Neko había resultado adjudicataria de bloques de radiofrecuencia en el Aviso 5G que tenían por objeto dar vida a una estrategia de conectividad escolar para las instituciones públicas de educación básica en el país y para cuya administración se creó el GAPE. En aquel momento, el operador había asumido el pago del canon en seis cuotas y, antes del vencimiento de la primera, hizo pública su renuncia.
“Antes del vencimiento de la primera cuota, Neko renunció al derecho de uso de radiofrecuencia y buscó eludir su obligación de depósito”, dice el propio comunicado de la Anatel, y continúa: “Sin embargo, el área técnica declaró el incumplimiento contractual de la empresa, lo que fue confirmado por Aquino en apelación”.
Inclusive, la estimación realizada por el GAPE advierte que unas 215 escuelas quedarían desatendidas de conectividad durante tres años como consecuencia de la falta del pago de Neko, y el titular de este organismo destacó “la importancia del cumplimiento de las obligaciones” y “desaprobó la postura de la empresa de tratar de eximirse de tan importante compromiso de aviso público”.
En la cobertura que realizó Teletime, además, se aclara que la oficina inició un Procedimiento de Evaluación de Incumplimiento de Obligaciones (Pado) con el objetivo de evaluar si el operador “estaba actuando con otros intereses comerciales con la postura regulatoria” dado que, según Aquino, podría estar “al servicio de intereses no republicanos , de otros segmentos de operadores que, en connivencia, pretenden beneficiar o empañar la subasta del 5G”.
En esa misma semana, los miembros del GAPE había conversado con funcionarios de la Secretaría de Comunicaciones y del Gobierno Federal sobre un posible ajuste de la política de conectividad, además de comenzar a analizar la incorporación de socios del sector privado.
Aquino, valoró en ese momento que la política de conectividad “debe ser perenne y que la idea inicial, pero aún en discusión, sería utilizar los más de 629 millones de dólares (3.100 millones de reales) obtenidos con la licitación del 5G para asegurar la conexión de las escuelas atendidas durante al menos tres años”.
La iniciativa de conectividad escolar ya llevó enlaces a unas 150 escuelas y, en una segunda instancia, deberá llega a otras 2.400 instituciones educativas, ubicadas en las regiones Norte y Nordeste, responsables de una parte importante de los 500.000 alumnos desconectados del país.
La iniciativa busca ofrecer una conexión de alrededor de 200 Mbps de velocidad, frente a un promedio de conectividad estimado en los 10 Mbps actuales, aunque también involucra la instalación de la red interna, la distribución de dispositivos (computadoras) y la capacitación digital del personal docente.
En la charla, además, se adelantó que aunque los plazos para el cumplimiento de las obligaciones de la subasta de 5G establezcan que para el 31 de diciembre de 2029 estará cubierta la totalidad de las ciudades del país, éstos resultan “muy largos” y que “la conectividad en las escuelas será más fácil”.
Lo cierto es que la capilaridad de la red 5G y sus encendendidos avanzan viento en popa en Brasil. En 302 municipios ya fue modificada la legislación de antenas, de modo tal que los sitios en los que habita el 39 por ciento de la población brasilera ya tiene una regulación que facilite este despliegue, según lo divulgó la propia Asociación Brasileña de Infraestructura de Telecomunicaciones (Abrintel).
De ese trabajo se supo que, entre las ciudades que ya tienen estas legislaciones actualizadas, hay 23 capitales y que solo Goiânia, Palmas, Salvador y Recife son las capitales que aún no renovaron la normativa. Además, advierte que São Paulo es el Estado con el mayor número de municipios con leyes actualizadas (74), seguido por Santa Catarina (63) y Río de Janeiro (42), por mencionar las tres primeras.
