La Argentina pisó el acelerador para tomar definiciones en materia de telecomunicaciones en un contexto netamente político. Casualidad o no, el 17 de mayo, cuando se celebró el día de Internet en el mundo, el gobierno anunció la decisión de otorgar todo el espectro de la banda de 6 GHz al uso no licenciado. No pasaron 48 horas y un nuevo MVNO fue ungido en el país, Telecentro, tal vez el operador de telecomunicaciones más polémico de este mercado. En ambos casos, las decisiones tomadas fueron más de corte político que técnico. Las reacciones consecuentes varían según qué eslabón de la cadena de valor de las telecomunicaciones ocupe cada actor.
Volcar el 100 por ciento del espectro a la banda de 6 GHz fue una decisión que se tomó en el Ministerio de Economía, a cargo de Sergio Massa, quien aspira a convertirse en candidato a presidente en los próximos comicios de octubre. Una semana antes, el funcionario había sido el orador más importante del Amcham Summit 2023, la conferencia que realiza la Cámara de Comercio Argentino-Norteamericana en este país. El coqueteo venía siendo evidente, en un contexto donde, además de las cuestiones vinculadas con las elecciones, la Argentina está reprogramando los pagos de la multimillonaria deuda que tiene con el FMI.
Explica que el anuncio sobre el uso no licenciado del espectro de 5.925-7.125 MHz lo haya realizado el propio Massa, acompañado -eso sí- por el presidente del Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom), Claudio Ambrossini, y por el conjunto de las empresas de Estados Unidos que se involucraron en el lobby para alcanzar ese objetivo. Google, Meta, Microsoft, Intel, Cisco y la Dynamic Spectrum Alliance (DSA) lo hicieron de manera presencial, Mientras que Amazon, Broadcom, Qualcomm, HPE y más directivos de las empresas mencionadas anteriormente lo hicieron de manera virtual.
Las reacciones que siguieron a la noticia fueron de malestar por parte del arco conformado por proveedores de equipamiento y operadoras de telecomunicaciones, y más matizada cuando se trata de las prestadoras de Internet más pequeñas. Desde la Cámara Argentina de Internet (CABASE), Ariel Graizer, dijo a TeleSemana.com que “siempre que haya más frecuencias disponibles, habrá más oportunidades. Faltan ver los equipos y precios en esas frecuencias, pero a medida que haya más países que los fabriquen seguro los habrá”.
Por su parte, Ariel Fernández Alvarado, presidente de la Cámara de Telecomunicaciones (CATEL), que nuclea a las cooperativas más grandes de la Argentina, subrayó que “claramente, Wi-Fi 6E es una herramienta más que tenemos sobre la caja. Teníamos la fibra, la movilidad y ahora el Wi-Fi 6E le da calidad de servicio a una tecnología que hasta ahora funcionaba sin esa característica”.
La ventaja que destacó es que, cuando un prestador chico salía a desplegar una red inalámbrica en una frecuencia que compartía con otros servicios, esa frecuencia podía tener ruido. Al sumar más frecuencia mejorará la calidad y la experiencia del usuario final. La perspectiva es que mejore la conectividad en aquellas localidades del interior de las provincias a los que llegar con 4G -eventualmente con 5G- o con fibra no es económicamente viable.
“Quiero destacar la importancia de la decisión tomada y los beneficios que implican para el desarrollo del país: el trabajo para los profesionales y la conectividad asegurada para las poblaciones alejadas; la posibilidad que todos los argentinos y argentinas puedan acceder a servicios de calidad y cantidad sin tener que pagar precios excesivos para acceder a este derecho fundamental de la humanidad. Ubicar portadoras de más ancho de banda permiten mejorar la calidad de los servicios de Internet”, dijo, por su parte, Miguel Angel Pesado, presidente del Consejo Profesional de Ingeniería de Telecomunicaciones, Electrónica y Computación (COPITEC).
El Enacom, en su comunicado, aseguró que ya existen en el mercado “más de 1.200 equipos que operan en esta banda (WIFI 6E), entre computadoras personales, teléfonos inteligentes, puntos de acceso y TV, y que pueden ponerse en uso, ya que no requieren obtención de una licencia sino sólo la homologación de los equipos”.
La otra determinación que tomó el regulador esta semana fue la de reconocer a Telecentro como nuevo Operador Móvil Virtual (OMV) de este país. Se trataría del segundo jugador de esta categoría, luego de Imowi, lanzada hace un año y medio atrás. Esto que podría ser lo lógico en cualquier sector o país no lo es en la Argentina. Telecentro pidió ser MVNO pero con un reglamento a medida o, en otras palabras, con uno que no tome los principios de la nueva regulación realizada en 2016 donde las operadoras con red deben publicar los precios de referencia para, a partir de ahí, articular la interconexión y demás acciones vinculadas en la prestación de estos servicios. De acuerdo a lo señalado por distintas fuentes de la industria, Telecentro no quiere ajustarse a esos precios de referencia sino pagar los que quiere.
Así lo explicó el regulador en un comunicado. “Enacom decidió la aplicación preliminar y provisoria de las condiciones que regirán las operaciones de las empresas prestadoras AMX Argentina S.A., Telecom Argentina S.A. y Telefónica Móviles Argentina S.A. como operadores móviles de red, y estableció las condiciones aplicables a la empresa Telecentro S.A. como operadora virtual”, sin dar más detalles.
“Esto es como tener un DNU 690 dentro del DNU 690”, dijo una de las principales operadoras de telecomunicaciones a TeleSemana.com, en relación a que, sobre la intervención de precios establecida por el Estado a través de ese decreto ahora se sumaría otra, a pedido de un actor privado y, además, refrendada por el regulador.
Que se sume un nuevo operador para brindar servicios móviles en el mercado suena bien, lo que genera ruido y malestar es que se promueve su ingreso con “reglas a medida” sin respetar la regulación vigente. Quienes objetan esta decisión argumentan que no se puede admitir que un MVNO quiera pagar un precio de interconexión por debajo del precio de referencia puesto que afectará a la “sustentabilidad” del negocio, además de generar competencia desleal.
Esta reunión de directorio del Enacom fue calificada como “escandalosa” por algunas fuentes consultadas. El expediente para aprobar el MVNO de Telecentro no les llegó a todos los directores en tiempo y forma, por lo que debieron abstenerse a la hora de votar.
Uno y otro caso mostraron que las decisiones tomadas en los últimos días en la Argentina en materia de telecomunicaciones fueron más políticas que técnicas. Y el sector está requiriendo más decisiones técnicas, que contemplen las conveniencias tecnológicas para mejorar los servicios de telecomunicaciones para la sociedad, por sobre las aspiraciones políticas de funcionarios de turno, o las presiones de jugadores privados con amplio poder de maniobra política para obstaculizar procesos y complicar el normal desenvolvimiento del sector.
De estas decisiones dependerán parte de las inversiones futuras del sector. La expectativa es que en junio se apruebe la convocatoria para la licitación 5G. Cuesta imaginarse, en este escenario, qué visos tomará ese proceso que exigirá altos niveles de tecnicismo para ponerle precio al espectro… y para pagarlo.
