WOM, Millicom y Liberty despiden el 2021 con grandes esfuerzos orientados a mejorar su participación en la región

WOM, Millicom y Liberty han sido los grandes provocadores de la industria de las telecomunicaciones de América latina en este año. Provocadores en un sentido amplio: han irrumpido con estrategias agresivas en algunos casos, en otros han decidido ser disruptivos con los pendientes, o han dado pasos tácticos cuyos resultados se verán mejor en el mediano y largo plazo. Lo cierto es que no puede dejar de mirarse lo realizado por estos tres operadores en este 2021 que llega a su fin.

Cinco años después de haber puesto pie en Chile, WOM desembarcó en el complejo mercado colombiano, tras haber adquirido espectro en 2019 y haber cerrado la adquisición de Avantel. Más allá de las denuncias cruzadas con sus competidores en ese país, el aterrizaje de esta empresa, propiedad del fondo Partners Telecom Colombia, provocó un terremoto al principio y cada tanto surgen réplicas de esta movida. WOM llegó a Colombia con una estrategia agresiva de precios y una campaña de márketing irreverente que provocó hasta la reacción de los reguladores, como la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC), organismo que sigue con lupa cada uno de sus movimientos.

En Chile, en tanto, la compañía cierra el año subiéndose al podio de los tres principales operadores móviles. Desplazó a Claro del tercer lugar y su propuesta comercial es cada vez más convergente, mientras en la licitación 5G se convirtió en el mayor vencedor al hacerse de frecuencias en 700 MHz, AW; 3.5 GHz, y 26 GHz . Pero aquí parece surgir una nueva etapa. Contrariamente a lo que podría esperarse, y en un escenario donde Movistar y Entel Chile ya comenzaron a brindar los primeros servicios de la nueva era móvil, WOM viene más rezagada en tramitación de permisos para construir torres de 5G en Chile y aún no informó lanzamientos comerciales. La compañía sostuvo que continuará concentrada en 4G porque todavía hay mucho por cubrir en este país con esa tecnología, aunque también aclaró que esta decisión forma parte de la base a establecer de cara a la próxima generación.

Millicom, con su marca Tigo, cierra su 2021 con una fuerte apuesta por América latina. Decidió desinvertir en las operaciones de Africa para concentrarse en la región y fortalecerse en mercados clave a partir de una inversión de 750 millones de dólares anunciada en el año anterior.

Un tercio de ese total se concentró en Panamá, en donde la compañía está extendiendo sus servicios fijos y móviles, además de poner en marcha su hub Fintech para impulsar más fuertemente el negocio de Tigo Money. Millicom es el operador de telecomunicaciones que más decididamente se ha volcado a obtener ingresos a partir de los pagos digitales.

Sobre el final del año avanzó sobre el total de la participación de Comcel en Guatemala, empresa con la que compartía un joint venture que llegó a su fin. La de este país es la operación más rentable de Millicom.

En Colombia, esta operadora debió mostrar otras artes. Ostenta una posición defensiva ante la llegada de WOM pues es el tercero en participación de mercado, y hace esfuerzos no solo en ampliar la cobertura de su red sino en mejorar la calidad de su servicio, un aspecto que se ha vuelto vital en este mercado. A esto se sumó la construcción de una red Open RAN 4G en 362 localidades rurales de Colombia; y la participación en el sandbox regulatorio convocado por la Comisión Reguladora de las Comunicaciones (CRC) donde su proyecto Contrato Convergente, uno de los tres que terminaron obteniendo el visto bueno del regulador, apunta a simplificar el proceso para contratar servicios fijos y móviles para los clientes con abono que quieren un contrato unificado. En este mercado, la operadora muestra hambre de mejora.

Liberty Global que, en la región, opera como Liberty Latin America también fue otro de los principales animadores, aunque con un perfil mucho más bajo. Cerró el tercer trimestre de 2021 con sus ingresos en franca recuperación, al incrementarse en un 32 por ciento. Esta operadora tiene puestas sus fichas en distintos países a través de VTR en Chile, Cable & Wireless en Panamá, Caribbean & Networks, Liberty Puerto Rico, y la unidad de Costa Rica conformada por Cabletica y la compra de Movistar. A esto se sumó, sobre el último tramo del año, la adquisición de Claro Panamá, por la que pagó 200 millones de dólares, lo que le permitirá incrementar su fortaleza en América Central.

La estrategia de la compañía pasa por ampliar sus redes tanto a partir de nuevos despliegues como del aprovechamiento de las infraestructuras de las empresas adquiridas en este lapso, aspectos que para la compañía pretenden ser la base de servicios convergentes e innovadores. El ARPU de Liberty es uno de los más altos de la región, al ubicarse por encima de los 48 dólares cuando se trata de servicios fijos y superiores a los 13 dólares en el caso de los móviles.

Sin dudas, 2022 será interesante para estos tres operadores por los movimientos dados en 2021. Si bien algunos de ellos también serán por efecto de decisiones tomadas en años anteriores, las perspectivas que se abren hacia adelante se fundamentarán en la necesidad de ampliar redes, mejorar cobertura, conectar a los no conectados, reducir brechas y elevar la calidad de servicio. Sin dejar de lado que, en ciertos mercados, la competencia es tan fuerte que los esfuerzos de estos tres operadores por ganar participación de mercado tendrán que ser equilibrados para no perder salud económico-financiera, más en una región fuertemente golpeada por la pandemia y sus propias crisis internas.

Este escenario tampoco puede dejar de lado las acciones que, en paralelo a este pelotón que sigue a Telefónica y Claro, encaran jugadores de mejor tamaño que vienen avanzando a fuerza de innovación, tal como sucede con Mundo y GTD en Chile, con Entel y Bitel en Perú, con el grupo Werthein tomando posición de las ex operaciones de DirecTV en  la región, con los MVNO que se reformulan en función de los nuevos tiempos, y con las estrategias que los pequeños prestadores de Internet en general realizan en cada una de sus áreas de influencia. Todo esto en paralelo con el advenimiento de 5G como escenario de fondo al que todos tendrán que mirar de cara al mediano y largo plazo.

El 2022 parece plantearse como un año muy interesante en materia de telecomunicaciones en América latina. Por las dificultades propias de la industria, por la situación particular de cada jugador, por la macro que presenta la región, por la aceleración de la transformación digital y la promesa, siempre presente, de la innovación.

Andrea Catalano es la Editora en Jefe de TeleSemana.com. Andrea es periodista y licenciada en Comunicación Social por la Universidad Nacional de Cuyo. Desde hace más de 20 años sigue al sector de las tecnologías de la información y las comunicaciones y su impacto en la economía y la sociedad. A lo largo de su carrera se ha desempeñado en prensa escrita, on line, radio y televisión.

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