La operación en Latinoamérica volvió a aportar números rojos a AT&T en el segundo trimestre

AT&T presentó sus resultados al segundo trimestre de 2019, en que obtuvo ganancias por 3.713 millones de dólares. La cifra es 27,7 por ciento más baja que lo informado un año atrás como consecuencia, según la compañía, de mayores gastos por la adquisición de Time Warner que fueron parcialmente soportadas por una estrategia de eficiencia de costos en distintos segmentos.

La firma mantiene como una de sus prioridades reducir su deuda a largo plazo. En los últimos seis meses el número ha caído al pasar de 166.250 millones de dólares a 157.937 millones de dólares. La compañía tiene distintas estrategias para lograr su objetivo. En las últimas horas, de hecho, ha sonado fuerte el rumor de que incluso podría desprenderse de su filial en Puerto Rico por 3.000 millones de dólares.

Sus ingresos aumentaron algo más del 15 por ciento interanual hasta 44.957 millones de dólares. Del total facturado casi el 79 por ciento corresponde al segmento comunicaciones, entre los que destaca el aporte de 17.512 millones de dólares del ítem movilidad. Warner Media aportó 8.350 millones de dólares, casi seis veces más que en igual período anterior. El resto provino de otros segmentos, entre ellos la presencia del operador en Latinoamérica.

La región aportó 1.757 millones de dólares en facturación a AT&T contra 1.951 millones de dólares informados un año atrás. La baja es equivalente al 9,9 por ciento. La variación negativa es consecuencia de una caída superior al 17 por ciento en Vrio, la filial que reúne las operaciones de DirecTV en Latinoamérica, que fue parcialmente  resistida por un crecimiento de cuatro por ciento en las ventas de la empresa en México.

La operación de Vrio, que reúne a 13,5 millones de usuarios, resultó en pérdida trimestral de 14 millones de dólares. La mejor performance en facturación para el mercado mexicano se debió, dijo la compañía, a un incremento de 14,9 por ciento interanual en el segmento servicios que se opacó por una caída en la venta de equipos. A pesar de esto, la operación en México arrojó pérdida por 207 millones de dólares, apenas mejor que los 217 millones de dólares negativos de hace un año.

Cuando AT&T anunció su llegada al mercado local dijo que alcanzaría la rentabilidad del negocio a más tardar el primer trimestre de 2019 pero debió sortear algunos obstáculos en el camino, como la presión competitiva y la desaceleración económica. En su reporte, la firma indica que está “a punto de alcanzar el equilibrio financiero (en México)” y se propone concretarlo en la segunda mitad del año, según el portal El Economista.

La empresa cerró junio con 18,02 millones de consumidores en México, de los cuales 12,1 millones corresponden a la modalidad pospago y 5,9 millones al segmento prepago. La comparación interanual en este caso resulta positiva, pues ganó en el último año 299.000 usuarios. La cuenta es el resultado de 401.000 nuevos usuarios prepagos, 51.000 reincorporación de clientes que habían migrado y 153.000 pospagos menos que igual período anterior.

Quizás los números rojos que presenta todavía México para AT&T explican la decisión de la compañía de renunciar a más de 20 concesiones de espectro para distintos tramos de la banda de 800 MHz. Con esto busca, según el mismo medio,  hacer más eficiente la operación de su negocio reduciendo la cantidad de espectro que usa para ofrecer servicios. Esto, adicionalmente, le evitará pagos de derechos por el uso de frecuencias cuyo costo se nombra a cada rato como uno de los problemas a resolver por las autoridades locales.

AT&T se desprendió de entre 16 y 35 MHz de ancho de banda según la región que se considere. Según los últimos reportes, la empresa contaba con 201,8 MHz de espectro para dar servicios en México cuando comenzó 2019, un 67 por ciento más que lo registrado un año atrás. El crecimiento interanual se explica por la adjudicación en la licitación IFT-7. Su decisión de no continuar con los papeles para 800 MHz se da justo antes de que el regulador local presente las condiciones para la licitación IFT-10, que incluye bloques regionales y nacionales en 2,5 GHz y AWS.

Nicolás Larocca es Técnico Superior en Periodismo (TEA) y Locutor Integral (ISER). Durante su carrera profesional se desempeñó en diferentes medios radiales, digitales y en gráfica como productor de contenidos, redactor y analista. Tiene conocimientos en comunicación interna, deportes, bancos y seguros, y desde 2013 se especializa en el mercado de las telecomunicaciones a escala regional.

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